Este sábado tuvo lugar un eventazo de los que dejan huella. Sobre todo dentro de una misma. Emprende Extremadura era la cita de las que os hablé con tantas ganas. Pues bien, resulta que aquí servidora tenía que colocarse delante del público y contar su experiencia en el emprendimiento. Era la sorpresa para los asistentes. Aunque más que una sorpresa, conmigo se llevaron un flan! Ay qué nervios… No recordaba lo que se sentía!
Pero ahora, con la tranquilidad de estar a solas delante de la pantalla, quiero repetir esa oportunidad que me brindó Extremde y dejar por escrito la charla. Sobre todo los sentimientos. Para que podáis volver aquí una y otra vez. A buscar la reafirmación en el “no estoy solo”. A buscaros a vosotros mismos muy adentro.